Del abuso de poder, a la perrera
[29-04-2014 12:09:33]
Raúl Lázaro Fonseca Díaz
Periodista Independiente
(www.miscelaneasdecuba.net).- Mientras que en la ciudad de Holguín la
policía quiere hasta encarcelar a un ciudadano "de a pie" por los
ladridos de una perrita "sata", en La Habana se permite una cría de
perros de raza en pleno corazón del consejo Plaza.
Eran las 8 de la noche del día 22 de este mes, cuando como acostumbra
Dexter Pérez Rodríguez que vive en el tercer piso del Edifico 1 apto. 6
de la calle Coliseo entre Rosenberg y San Carlos, ciudad de Holguín,
bajó a su perrita, cuando el hijo del teniente coronel retirado Rolando
Legra Guzmán, por creer que la misma ladraba mucho debía ser asesinada.
A la respuesta de su dueño ante semejante abuso se personaron momentos
después sobre las 9:30 de la noche padre e hijo con la policía entre los
que se encontraba el agente con número 21 842, transportado por la
microonda policial con chapa 489 para detener a Dexter Pérez Rodríguez
por "alteración" del orden.
El mismo se negó a abrir la reja que guarda la puerta de su apartamento,
por lo que el grupo formado por el Teniente coronel Rolando Legra, su
hijo y los policías trataron de derribar la reja, pero se lo pensaron
mejor pues Dexter comenzó a llamar por teléfono desde la sala de su
casa, a la vista y oídos del grupo, a opositores del barrio y
periodistas independientes, acción que frenó los instintos del grupo
policial de llevarse a toda la familia presa.
Nuria Hijuelo Marrero, esposa de Dexter Pérez se encuentra recién
operada de ambos senos, todavía tiene 60 puntos quirúrgicos y el hijo de
ambos, menor de edad se negaron a abandonar el apartamento por lo que el
teniente coronel Rolando Legra Guzmán decidió levantar "en fe lucha" a
la brigada de respuesta rápida de la zona, los revolucionarios
"accionaron" alrededor del edifico en cuestión hasta cerca de las 12:30
de la noche.
Al día siguiente, la policía se volvió a personar en la vivienda de
Dexter Pérez amenazándolo de que iba ser detenido por escándalo público
y resistencia al arresto, lo que no se ha producido hasta el día de hoy.
En el patio de la casa sita Ayuntamiento 203 entre Ayuntamiento y 1era,
municipio Plaza, la Habana, desde hace años se construyó una instalación
para la cría de perros de raza, cuyos ladridos y el mal olor que
despiden sus deposiciones atormentan al vecindario que reside en los
edificios que rodean dicho patio y hasta varias cuadras a la redonda.
Sin embargo, ni todas las organizaciones políticas de la zona (Partido
Comunista, Comité de Defensa de la Revolución, Combatientes, etc) han
logrado que se retire tan perjudicial "negocio", que según rumores
pertenece a un extranjero que utilizando de pantalla a un cubano
"emprendedor" se sirvió de la apertura del trabajo privado para
establecer este negocio a metros del Palacio de la Revolución donde se
asientan todos los poderes de la Isla.
Lo que marca la diferencia de estos dos casos de abuso de poder, es que,
Ada la dueña de la casa habanera que rentó su patio para la cría de
decenas de perros, es la arquitecta de la comunidad, mientras que,
Dexter el holguinero dueño de la perrita "sata" es un destacado opositor.
El abuso de poder, ya es tan común que abarca hasta los perros y se
convierte en perrera.
Source: Del abuso de poder, a la perrera - Misceláneas de Cuba -
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/Article/Index/535f7a5d3a682e15bc612213#.U1-U5_mSwx4
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