Wednesday, April 23, 2014

55 años de “gorrión”

Mientras en cámara lenta actualizan el socialismo, los cubanos nos las
arreglamos para aligerar cargas cada vez más pesadas
miércoles, abril 23, 2014 | Jorge Olivera Castillo

LA HABANA, Cuba.- El escepticismo y la resignación reinan entre los
cubanos de a pie. Para nosotros, castrismo y eternidad son sinónimos.

Creemos que lo mejor es irse sin boleto de regreso o empeñarse uno en el
perfeccionamiento de los medios, raramente lícitos, que facilitan la
supervivencia, luego de estos 55 años que van durando la mal llamada
Revolución.

Lo que dice Raúl Castro en relación a los cambios es desechado de
inmediato. La gente está harta de manipulaciones y promesas incumplidas.

"Siempre se las ingenian para salirse con las suyas. No sé si será la
suerte o el azar, pero ahí están, disfrutando de la buena vida. Digan lo
que digan y hagan lo que hagan, su propósito es permanecer en sus
puestos hasta que se mueran. Quien piense lo contrario, está en las
nubes. Hay que adaptarse a la realidad. Es lo que nos tocó vivir",
expresa Gilberto, un ingeniero en sistemas de control automático que
ejerce otras funciones, sin nada que ver con su perfil profesional, para
poder aumentar honorarios.

"En mi tiempo libre, forro colchones a domicilio, relleno fosforeras. Lo
que me pagan en la empresa es una bobería. ¿Quién puede vivir con 25
pesos convertibles en Cuba?, agrega.

Los oficios que realiza, desde hace varios años, no cuentan con la
licencia para poder ejercerlos. Alega que la verdadera ilegalidad está
en las altas tasas tributarias.

Miles de personas practican disimiles labores al margen de la ley
arriesgándose a ser penalizados con multas, decomisos y hasta con la
cárcel si reinciden en el delito.

Los cubanos que han obtenido permisos para desempeñar algunas de las
categorías contempladas dentro del trabajo por cuenta propia, también
deben recurrir a todo tipo de subterfugios. La rentabilidad está
asociada a la permanente violación de las normas establecidas.

Para Ana, licenciada en enfermería, Raúl Castro es un personaje de la
misma calaña que su antecesor. Otro anciano al que no le importa lo que
pase más allá de su círculo familiar.

"Es cierto que nos aumentaron el salario, pero sigue siendo
insuficiente. Comer tres veces al día como Dios manda es imposible.
Tengo la impresión de que nunca vamos a salir de la miseria", apunta con
una tenue inflexión de la voz y acto seguido añade: "A mí hace rato se
me acabó la esperanza. Trato de no pensar mucho en los problemas. En
definitiva, hay mucha gente en peores condiciones".

El derrotismo y la desesperanza son fácilmente comprensibles. Son más de
50 años bajo la hegemonía de un partido que criminalizó la disensión y
las libertades fundamentales.

La situación no ha cambiado.

Mientras en cámara lenta actualizan el socialismo, los cubanos nos las
arreglamos para aligerar cargas, que se tornan más pesadas a causa de
las imprecisiones del proceso.

Cada cual se empeña en hacerlo lo mejor posible sobre los restos de sus
esperanzas.

Source: 55 años de "gorrión" | Cubanet -
http://www.cubanet.org/opiniones/55-anos-de-gorrion/

No comments:

Post a Comment