El país de las sombras largas
Lunes, 29 de Octubre de 2012 11:11
Escrito por Oscar Sánchez Madan
Cuba actualidad, Cidra, Matanzas, (PD) Una densa y gigantesca tiniebla
matiza el complejo panorama cubano: el secretismo oficial, fenómeno
característico de los regímenes pos-totalitarios, que asfixia, la vida
espiritual y material de la nación.
Es evidente que el gobierno de los hermanos Castro no ha cejado en su
empeño de encubrir verdades, que gracias al acelerado desarrollo de la
informática en el planeta, más temprano que tarde, se saben. A pesar de
sus persistentes esfuerzos por silenciarlas, una acelerada
transformación de los medios informativos ya no se lo permite.
No es un hecho fortuito que en los últimos meses, fue la prensa
independiente de la isla la que reportó la existencia de casos de cólera
y dengue en diversas regiones del país.
Tampoco fue casual que hace pocas semanas, trabajadores de la
comunicación que residen en países democráticos, donde se respeta el
derecho de las ciudadanas y los ciudadanos a recibir información,
difundieron noticias sobre la deserción de la hija del denominado Zar de
la economía cubana, Marino Murillo, vicepresidente del Consejo de
Ministros y de varios periodistas y deportistas nacionales.
Asombra que ante sucesos como estos, tanto los funcionarios del
gobierno, como la prensa oficial, hayan mantenido un silencio sepulcral,
al menos, hacia el interior de una isla donde al 97 porciento de los
nacionales se les prohíbe el acceso a la Internet.
Como una plaga que corroe nuestra sociedad, el secretismo gubernamental
ataca a las instituciones oficiales, desde la base hasta la
superestructura, en un estado, cuyo jefe máximo hace urgentes llamados a
los comunicadores a despojarse de una proverbial parálisis informativa,
a la vez que advierte de que se tenga mucho cuidado con reportar aquello
que, supuestamente, pudiera denigrar eso que él llama "revolución
socialista participativa".
A los periodistas oficialistas, muy talentosos, por cierto, no se les
permite ejercer su derecho a informar con libertad lo que acontece en el
país. Esa es la razón por la que el pueblo cubano y el mundo, recurren a
los medios alternativos para conocer detalles de importantes hechos de
la vida nacional.
Pero es muy cierto, también, que los comunicadores gubernamentales deben
tener la valentía de desafiar las arbitrarias prohibiciones y la
mentira, como lo hacen los trabajadores de la prensa no oficial.
Éstos últimos, batallan día a día, por cumplir su sagrado deber
profesional, a pesar de las golpizas, las ofensas, la falta de recursos
y los encarcelamientos de que son víctimas.
Comunicadores como Sayli Navarro, Iván Hernández Carrillo, Yoani
Sánchez, Juan González Febles, Guillermo Fariñas, Calixto Ramón Martínez
Arias, Orlando Luis Pardo Lazo, Luis Cino, Dania Virgen García, Ainí
Martín Valero, entre otros, demuestran, minuto a minuto, que la verdad
hay que defenderla y difundirla, a cualquier precio. Su valiente actitud
devela un amor sin límites a la profesión que un día escogieron para
ayudar a la comunidad.
Más que quejarse por la irritante censura un informador que se respeta,
debe trabajar con inteligencia y denuedo para burlarla. Está obligado,
por convicción, a defender sus derechos, ejerciéndolos.
Hace pocos días, 62 médicos del hospital capitalino "Calixto García",
enviaron una extensa carta al presidente Raúl Castro para informarle
sobre los graves problemas existentes en dicha institución. Refieren
éstos, en la misiva, entre otras cosas, que la instalación tiene una
estructura constructiva en deplorables condiciones. Señalan, asimismo,
la notable falta de recursos básicos, desde la sangre, que a veces no
existe, hasta otras de índole material.
No es un secreto que lo que sucede ese hospital ocurre también en otras
instituciones médicas. Por ejemplo, la reconocida disidente, Edilie
Moreno Fernández, quien reside en Pedro Betancourt, ha denunciado en
reiteradas ocasiones, incluso mediante una carta dirigida al ministro de
Salud Pública, Roberto Morales Ojeda, la falta de higiene existente la
Sala de hemodiálisis del hospital "Faustino Pérez", de Matanzas. Más de
30 pacientes afectados por insuficiencia renal crónica, que eran
asistidos allí, han fallecido desde enero de 2011.
Sin embargo, la población observa que en la mayoría de las informaciones
de la prensa oficial y en las declaraciones de altos funcionarios del
gobierno, referentes a la esfera de la Salud, se mencionan supuestos
logros y avances tecnológicos y científicos que en muy poco ayudan a la
ciudadanía.
Un pernicioso triunfalismo se ha apoderado de los medios de prensa
oficialistas y de las instituciones. Deberían realizarse más trabajos
periodísticos investigativos en los que se señalen los problemas reales
presentes en la esfera de la Salud Pública, se delimiten las
responsabilidades existentes, a todos los niveles, y se hagan propuestas
de cómo el gobierno central y las administraciones locales deben
enfrentarlos.
Esto hay que hacerlo en todos los sectores de la sociedad donde el
secretismo y los exiguos contactos de los funcionarios del gobierno con
la población impiden conocer los graves problemas que afectan a la nación.
Escandaliza saber que un periodista independiente, Calixto Martínez
Arias, del Centro de Información "Hablemos Press", haya sido golpeado, y
arrestado, por agentes de Seguridad del Estado, y recluido en una
prisión, donde espera juicio, por desacato. Se sabe que intentaba, el
pasado 16 de septiembre, investigar el deterioro de un cargamento
enviado a Cuba por la Organización Panamericana de la Salud, que se
hallaba en el aeropuerto internacional José Martí, de La Habana.
La oligarquía castrista debe saber bien claro que si no abandona el
triunfalismo barato y la engañosa propaganda ideológica, Cuba no dejará
de ser la isla de las sombras largas, donde el secretismo oficial se
pasea por las instituciones estatales, como el enemigo que insulta y
arruina la inteligencia y la iniciativa de sus nobles y laboriosos
pobladores.
Para Cuba actualidad: sanchesmadan61@yahoo.com
http://primaveradigital.org/primavera/politica/54-politica/5595-el-pais-de-las-sombras-largas-.html
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