Nunca se ofreció una explicación oficial sobre el fracaso del convenio
de 2008
JAVIER BRASSESCO | EL UNIVERSAL
lunes 1 de agosto de 2011 12:00 AM
El zoológico de Caricuao cumplió ayer 34 años en medio de un proceso de
renovación de su infraestructura, con bebederos por primera vez en sus
instalaciones, con cien cestas nuevas de basura y con rehabilitados
baños y kioscos piñateros.
Hay un problema, sin embargo, que sigue arrastrando el zoológico, y que
ya hace tres años Carlos Audrines, por entonces coordinador del parque,
reconocía como el mayor que enfrentaba este lugar: el envejecimiento de
los animales.
En aquel momento la bandera de Audrines era un intercambio de animales
con Cuba que traería un hipopótamo pigmeo, un rinoceronte blanco, dos
leones, una jirafa y una hiena rayada, entre otros. Se anunció cientos
de veces y por todos los medios que los animales llegarían para el
aniversario 31 del parque (el 31 de julio de 2008), pero luego se fueron
poniendo excusas, desde el ciclón Ike que asoló Cuba hasta problemas de
papeleo, hasta que el tema desapareció del radar de la opinión pública.
Al final hasta se llegó a decir que nunca había existido un convenio
como tal sino simplemente conversaciones entre funcionarios de los dos
países.
Y aunque El Universal ha intentado en varias ocasiones obtener una
respuesta oficial al respecto por parte de Inparques, nunca se ha
conseguido. Incluso para este trabajo se solicitó una entrevista con el
nuevo coordinador, Gabriel Lugo, pero no fue concedida.
Lo único cierto es que los animales de Cuba jamás llegaron a suelo
venezolano, y que en casi veinte años el único modesto intercambio que
ha hecho el parque fue con un zoológico de Lara hace dos años y gracias
al cual llegó un hipopótamo que murió en marzo pasado, oficialmente
debido a un cólico.
Un veterinario que trabajó en este zoológico en 2008 y quien prefirió
reservar su identidad, denunció que este hipopótamo estuvo encerrado por
dos años en condiciones precarias porque en el zoológico no tenía un
espacio donde exhibirlo: "De ahí se escapó tres veces y al final lo
colocaron en la piscina con los rinocerontes, donde el público pudo
verlo apenas un mes antes de que muriera".
El parque luce bastante bien, y se anunció que incluso volverá a
llenarse la seca laguna avifauna en la segunda etapa de la
rehabilitación, pero sus animales siguen envejeciendo y no hay
renovación. El más grande de todos, la elefanta Ruperta, tiene ya 39
años, es decir, cinco más que el propio zoológico.
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