35 años después de aquellos lemas antiyanquis

35 años después de aquellos lemas antiyanquis
agosto 5, 2015 2:34 am

Cuba actualidad, Marianao, La Habana, (PD) El restablecimiento de las
relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos ha marcado el inicio
de una nueva era en la que suenan anacrónicos los lemas antiyanquis de
hace 35 años, en la época del éxodo del Mariel.

Lejano en el tiempo está ya aquel 5 de abril de 1980, cuando más de diez
mil cubanos irrumpieron en la Embajada de Perú en La Habana exigiendo
asilo diplomático para abandonar el territorio nacional.

Al entonces gobernante cubano Fidel Castro le sirvió aquel incidente
para librarse de todas aquellas personas descontentas con su régimen. De
paso, aprovechó para insertar en la sociedad norteamericana algunos
maleantes provenientes de Cuba. Para ello, sacó de las cárceles a
cientos de reos forzándolos a partir.

Hurgaron en cada barrio en busca de desafectos reales o inventados. Los
encontrados, después de ser insultados, apedreados y bombardeados con
huevos por el populacho, fueron catalogados como escorias, gusanos,
lumpen y traidores.

El Partido Comunista propició un clima de repudio popular al son de
eficaces lemas para la ocasión: Pin pon, fuera abajo la gusanera, Fidel,
seguro a los yanquis dale duro, Cuba sí, yanquis no, entre otros.

Fidel Castro tapó el descontento en sectores del pueblo orquestando una
campaña contra los Estados Unidos y los enemigos internos de su gloriosa
revolución.

El gobierno cubano aceptó que dejaran el país si sus familiares venían a
recogerlos en el puerto de Mariel, al noroeste de la isla.

Entre el 15 de abril y el 31 de octubre de 1980, más de 125 000 cubanos
zarparon hacia la Florida.

Las embarcaciones iban atestadas de personas, algunos en contra de su
voluntad.

Con el éxodo de Mariel, como fue recogido por la historia aquel hecho,
miles de familias cubanas quedaron desintegradas.

Los marielitos, nombre con que fueron bautizados los emigrantes cubanos,
en los Estados Unidos, para bien o para mal, se vieron precisados a un
nuevo comienzo en sus vidas.

Hoy muchos peinan canas. Otros han muerto. En suelo norteamericano
mantuvieron intactas sus raíces y el apego a su Cuba amada, a pesar del
tiempo y la distancia.

Muchos lograron prosperar, a golpes de esfuerzo y sacrificio, y
engendrar generaciones aptas para brindar lo mejor de sí en la nueva patria.

Mientras tanto, en Cuba, los lemas que fueron entonados en contra del
imperialismo yanqui, empiezan a ser convenientemente olvidados.

Lo que no podrá olvidarse es el recuerdo de las amargas despedidas en
1980 de los familiares golpeados, escupidos, embarrados de huevo y
tildados de escorias. La abuela que nunca pudo besar a su nieto de
Miami. La madre que murió sin ver nunca más a su hija exiliada.

Ahora ya es posible la visita inaplazable de un pariente que quiere
conocer la entrañable Habana de sus difuntos padres para esparcir sus
cenizas.

Ya hay relaciones diplomáticas con Estados Unidos, pero poco ha cambiado
en Cuba. Más allá de las consignas olvidadas o las todavía vigentes,
seguimos con el mismo perro, pero con diferente collar. Por cierto, no
muy diferente.

Para Cuba actualidad: kikitodiaz53@gmail.com

Source: 35 años después de aquellos lemas antiyanquis | Primavera
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