Perfumes, jabones y detergentes en Cuba

Perfumes, jabones y detergentes en Cuba
junio 17, 2015 11:22 am

Cuba Actualidad, Plaza, La Habana (PD) Los métodos para obtener esencias
con diferentes fragancias para hacer perfumes han evolucionado desde la
más remota antigüedad hasta hoy. Eso forma parte de las tradiciones de
todos los pueblos del orbe.

"Perfumistas y perfumes" es un voluminoso libro escrito por Leonel
Amador, especialista del ramo, con estudios realizados en Francia,
profesor de varias generaciones y fundador de la Industria Cubana de
Perfumería, entre otros cargos y reconocimientos.

El libro fue publicado por la Editorial Científico-Técnica en 2014. La
edición estuvo al cuidado de la licenciada María Luisa Acosta Hernández.

Comentaré el capítulo sobre esta industria en nuestro país desde
mediados del siglo XIX hasta los actuales días.

En dicho capítulo hay referencias a productos elaborados en fábricas
nacionales, algunos con participación extranjera.
Alrededor de 1860 los hermanos españoles Juan y José Sabatés Costa,
fundaron la primera fábrica de perfumería y jabones en Cuba. Se ubicó en
sus inicios en la calle Matadero No. 1, pero después de un incendio de
grandes proporciones se mudaron en la misma barriada a una nueva
locación de mayor capacidad, situada en Universidad No. 72.

La compañía Sabatés mantuvo la supremacía largo tiempo. Fabricaba
jabones para lavar, amarillos y blancos, nombrados Universal, Calabaza,
Caramelo, Veta Azul, Coco y Sabatés. Estas denominaciones cambiaron más
adelante y surgieron las marcas La Llave –el nombre que posiblemente se
relacione con la frase "El Cerro tiene la llave"-, la muy aceptada Oso y
el jabón de olor Camay.

Otra producción destacada de esta industria fue el detergente Ace, cuya
caja de cartón era de fondo rojo. Este producto sirvió de patrocinador
del programa televisivo de la CMQ "Aquí todos ACE de todo", cuyo
animador era el inigualable Germán Pinelli. La atracción central del
programa era la sección del Palo Ensebado, donde un hombre trataba de
subir por un madero liso engrasado. El que lograra tal proeza recibía
una buena recompensa en objetos donados por la firma.

El competidor más relevante que tuvo Sabatés fue Crusellas. La compañía
fue creada por el binomio integrado por los hermanos Juan y José
Crusellas Vidal, quienes fundaron en 1885 "Crusellas Hermanos y
Compañía" en la Calzada de Monte 314 y 316. Para ampliar el negocio, se
mudaron en 1914 para Balaguer entre San Julio y Durege, también en El Cerro.

Esta factoría se destacó con el detergente Fab, de envase azul. Hasta
sirvió para chistes, como aquel del chino que cuando le preguntaban si
era de Fu (Fulgencio Batista) o de Fi (Fidel Castro) y de cuya respuesta
dependía su vida, respondía: "yo soy de Fab, que da casa y no alanca cabeza"

Esta fábrica producía los polvos, jabones y colonia Mercedes, y más
adelante los jabones Hiel de Vaca y Palmolive. Además patentizó nuevos
perfumes como la "Kolonia 1800 y Rhum-Quin-Quina, que fueron las
primeras manufacturas de la Compañía Nacional de Perfumería, parte
integrante de esa firma.

Las dos compañías con el tiempo hicieron sociedad con los consorcios
estadounidenses Procter & Gamble y Colgate-Palmolive-Peet Co., por lo
cual se introdujeron nuevos renglones al mercado nacional como la pasta
dental Colgate y el detergente Tide, entre otros artículos. Esta etapa
se caracterizó por los premios y concursos, donde se llegaba hasta a
regalar una vivienda amueblada.

Más modestos que Sabatés y Crusellas fueron los Laboratorios Gravi.
Estuvieron ubicados en sus comienzos en la farmacia "La Central" o
Botica de López, en Jovellanos, Matanzas. Sus principales mercancías
fueron la pasta dental y el agua de violetas del mismo nombre, aunque el
más reconocido fue el jabón de lavar Rina, que era anunciado por la sin
par animadora Consuelito Vidal, la cual decía la frase "Fuego a la
lata", que se convirtió en tema de una canción interpretada por Garrido
y Piñeiro.

La nacionalización de estas industrias y otras 76 más, llevó al
surgimiento de Suchel que constituye hoy un monopolio estatal.

Estos artículos de aseo que antes estaban al alcance de todos por sus
precios en centavos, ahora solamente se comercializan en cuc o su
equivalente en pesos, además de estar deficitarios en múltiples
ocasiones. Otro gran progreso de la revolución.

Para Cuba Actualidad, jorgelibrero2012@gmail.com

Source: Perfumes, jabones y detergentes en Cuba | Primavera Digital -
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