Las impedimentas del Gobierno cubano para el libre acceso a Internet

Las impedimentas del Gobierno cubano para el libre acceso a Internet
junio 10, 2015 9:43 am

Cuba actualidad, Capdevila, La Habana, (PD) Luego del anuncio del 17 de
diciembre de 2014 del restablecimiento de las relaciones diplomáticas
entre Washington y La Habana, el gobierno cubano ha desplegado un
conjunto de acciones diversionistas cuyo propósito es enviar señales que
no se corresponden con lo que realmente ocurre en Cuba. En esta labor
han jugado un papel destacado los estrategas del Departamento Ideológico
del Partido Comunista y los servicios especiales, que han echado a andar
su maquinaria propagandística para presentar al gobierno cubano como
respetuoso de las normas de la democracia, la pluralidad política y el
estado de derecho.

La manipulación de la realidad cubana es escandalosa y vergonzosa.

El Ministerio de Relaciones Exteriores (MINREX) celebró un aquelarre
titulado Conferencia Internacional Nuevos Escenarios de la Comunicación
Política en el Ámbito Digital 2015, del 5 al 7 de junio en el capitalino
Palacio de la Convenciones, al que asistieron más de 100 expertos de 34
países de América Latina y el Caribe, Europa, Asia y África.

Dicha conferencia fue presidida por el canciller cubano Bruno Rodríguez,
que fue acompañado en la presidencia por José Ramón Balaguer, miembro
del Secretariado del Partido Comunista, Rolando Alfonso Borges, jefe del
Departamento Ideológico del PCC y los viceministros de Comunicaciones y
Relaciones Exteriores.

Realmente hay que ser cara dura para faltarle el respeto al agobiado
pueblo cubano con un evento como este.

Uno de los brujos presentes en el aquelarre, el viceministro del MINREX,
Abelardo Moreno, se atrevió a hablar de los esfuerzos que hace el
gobierno cubano para "fortalecer y desarrollar el acceso a las nuevas
tecnologías, con el fin de conectarnos al conocimiento y participar del
concepto de compartir y no excluir".

Como los brujos saben lo que hacen, no quedó ninguna duda de que por el
momento la población cubana no tendrá libre acceso a Internet. Los
organizadores del aquelarre recurren como justificación al fantasma de
la ciberseguridad y la falta de regulaciones para el uso masivo de la
red de redes.

El alto representante de la burocracia que dirige la diplomacia cubana
de acuerdo a las órdenes de los militares que gobiernan Cuba, dejó claro
que "el objetivo es lograr el establecimiento de regulaciones coherentes
con las normas, principios y políticas sociales que coadyuven a que
Internet sea una zona de paz y prosperidad".

"Constituye un desafío transitar por la autopista de la información y el
conocimiento de manera sería y ética", dijo.

Lo que se debatió y acordó en la conferencia no se corresponde con el
reducido empleo de las diferentes opciones de las TIC, a la cual
prácticamente no tiene acceso la mayoría de la población cubana.

Hablar de libre información, acceso a Internet, despliegue de las
diferentes opciones de la telefonía celular inteligente, cuando son muy
pocos los cubanos que pueden acceder a estas tecnologías, es realmente
un chiste de mal gusto.

Sobre el evento, los medios oficiales se limitaron en publicar lo que
Osvaldo Borges y el Departamento Ideológico, el principal censor de la
prensa oficial, les autorizó.

El diario Juventud Rebelde publicó trabajos de sus obedientes y
adocenados periodista con títulos como "Tecnología de la información por
la sostenibilidad económica" y "Ciberespacio: un sector de desarrollo
estratégico".

El diario Granma, por su parte, publicó "Las TIC y su impacto en las
relaciones Internacionales" y otro con un título más lacónico: "El
concepto es compartir y no excluir".

La verdadera estrella de este aquelarre fue un nuevo y bien entrenado
brujo, Senén Casas, alto oficial de la Fuerzas Armadas Revolucionarias,
primogénito del fallecido general Zenén Casas, un típico comisario que
se desempeña como secretario del Consejo de Informatización y
Ciberseguridad, tenebroso aparato que se ocupa de controlar el espacio
virtual y que cuenta con el apoyo económico, logístico y de calificados
especialistas de China y Rusia.

Senén Casas tiene estrechos vínculos de amistad, casi familiares, con el
general heredero Alejandro Castro Espín, que funge como consejero
directo para los problemas de la seguridad nacional de su padre, el
presidente Raúl Castro. Por tanto, es de suponer que el general Castro
Espín apoyará a Casas en todo lo que necesite en el desempeño en su
labor represiva en el campo de las TIC.

Para no dejar ninguna duda de cuál es su responsabilidad como
controlador principal de estas técnicas propias de las sociedades
inteligentes, y a modo de justificación de su labor, afirmó: "Nuestros
países pueden ser objeto de ciberataques y cada día estamos expuestos a
estas amenazas, para combatirlas, es necesario la cooperación
mancomunada entre todos los estados".

Lo que sí está claro es que esta conferencia no se convocó para dar
libre acceso al pueblo cubano a las TIC, sino todo lo contrario.

Los controles arreciarán, la conexión a Internet y la televisión
satelital continuarán vedadas a la mayoría de los cubanos.

Los que le dieron la orden al MINREX de organizar el aquelarre no están
interesados en lo más mínimo en que la población esté informada. Eso
forma parte de la estrategia de los gobernantes cubanos para garantizar
su permanencia en el poder.
Para Cuba actualidad: origenesmadiba@gmail.com
Foto: Osmar Laffita

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