Inversiones, ¿y los derechos humanos?

Inversiones, ¿y los derechos humanos?
[15-05-2015 20:38:42]
Jorge Olivera Castillo

(www.miscelaneasdecuba.net).- Con la entrada en escena del presidente de
la República Francesa Francois Hollande, la plana mayor del socialismo
cubano obtiene otro tanto en el evento que tuvo su debut el 17 de
diciembre de 2014 con el anuncio de Obama y Castro de sacar del
congelador las relaciones bilaterales.
La fecha fue como un tiro de arrancada para que se iniciaran las
peregrinaciones por La Habana de los más conspicuos personajes del mundo
de la política y la economía.

Es fácil colegir que las visitas de alto nivel aumentarán en la medida
que el partido único acceda a entreabrir un poco más las compuertas del
cambio.

Parece que ya existe un pacto no revelado entre el capital transnacional
y la élite que todavía usa la hoz y el martillo para sus zafarranchos
patrioteros.

Detrás de esa fachada proletaria aguardan los deseos de entrar de lleno
en la órbita de las jugosas utilidades en dólares o euros a partir de la
eventual ampliación de los negocios con empresas del primer mundo que
por el momento prefieren husmear entre las ruinas que adornan la Isla de
punta a cabo o mantenerse, en la distancia, con los oídos abiertos de
par en par.

Solo esperan la señal del dueño que de vez en vez reitera su apego por
las pausas. Quiere que todo le salga a pedir de boca. No quiere fallar.
¿Cuántas margaritas habrá deshojado en aras de decidirse cuándo dar el
pitazo para que comience el festín?

La estadía del señor Hollande en la capital cubana, confirma la
irreversibilidad del proceso de hermanamiento entre el partido único y
las principales democracias occidentales.

En los reportes de las pláticas, nada de derechos humanos, solo tanteos
para ubicar las más tentadoras ofertas de inversión y elogios a granel
para los egregios subastadores del manicomio.

Las raciones de toletazos que reciben los opositores son asuntos
menores, incidentes que no deben empañar el curso de los acontecimientos.

Esas amplificaciones al olvido llegan en un momento crítico. Nuevamente
legitimado, ahora por el dignatario socialdemócrata de una de las
potencias europeas, el gobierno de la Isla no depara en usar la fuerza
contra sus adversarios ideológicos.

A juzgar por el repunte de la intensidad de los actos represivos en las
últimas semanas es razonable pensar que cuentan con los márgenes de
tolerancia necesarios para continuar practicando los abusos.

Minimizar el interés por este tópico, expone a mayores peligros a todos
los que intervienen en la lucha prodemocrática.

Desafortunadamente eso no parece importarles mucho a los convidados.

Así las cosas, el primer ciclo de la trama parece que se cierra con el
arribo del Papa Francisco en el venidero septiembre.

Para la fecha, quizás haya alguna eventualidad humanitaria, dígase
indultos u otros "bondades", como ocurrió con la presencia en Cuba de
sus santidades Juan Pablo II, en 1998 y Benedicto XVI, en el 2012.

Va y a lo mejor es el momento esperado para el anuncio de un paso más en
el camino de la reforma económica sin olvidar los esfuerzos de maximizar
la discreción en los castigos a repartir con pasión zoológica por las
brigadas de respuesta rápida.

Source: Inversiones, ¿y los derechos humanos? - Misceláneas de Cuba -
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/Article/Index/55563d323a682e0c70bab360#.VVcQFfmqqko