Dos imágenes y un resultado incierto

Editorial: Dos imágenes y un resultado incierto
DDC | Madrid | 12 Abr 2015 - 7:40 am.

Mientras avanza el proceso de tolerancia hacia el régimen, la situación
política, económica y social de la Isla continúa grave.

Raúl Castro y Barack Obama hablaron tres veces en Panamá en un ambiente
de respeto, saludos formales y diálogo; justamente la actitud contraria
de las turbas castristas que reventaron varios eventos de la Cumbre de
las Américas.

En este nuevo escenario, el castrismo acepta estrechar la mano de su
enemigo histórico, pero no que los cubanos hablen entre sí sobre sus
principales problemas. Mientras los gobernantes escenificaban el
civilizado ritual, los subordinados de Castro mostraban su intolerancia
a través de la violencia —verbal y física— contra opositores cubanos y
activistas de otras nacionalidades asistentes al Foro de la Sociedad Civil.

Este contraste refleja la esencia del momento histórico. Para La Habana,
normalizar relaciones con Estados Unidos, además de una victoria
diplomática, resulta una operación de superestructura y no el inicio de
una transformación interna, ni mucho menos un nuevo horizonte
democrático para los cubanos.

Más que un evento de la sociedad civil, el castrismo intentó provocar un
foro de la barbarie. Dichas actuaciones constituyen un grave e
inaceptable episodio, que debería ser condenado por las autoridades
locales, la Organización de Estados Americanos (OEA) y por toda la
comunidad internacional.

Permitir que organizaciones gubernamentales cubanas asistieran al Foro
de la Sociedad Civil fue, de entrada, una torpeza del Gobierno de
Panamá, comparable con la ineptitud de la policía para frenar la
violencia de las turbas castristas en las sedes de la Cumbre. Y el
intento de equiparar responsabilidades entre agresores y agredidos
demuestra el grado de deterioro de los valores democráticos en la región.

Tras la Cumbre de Panamá, la integración de Cuba en los foros
internacionales ya es plena. La única dictadura del continente tiene
ahora voz y voto, pero parece que también derecho a ejercer la
violencia. Mientras avanza el proceso de tolerancia hacia el régimen, la
situación política, económica y social de la Isla continúa grave. De
nada de ello se habló en la VII Cumbre de las Américas.

Source: Editorial: Dos imágenes y un resultado incierto | Diario de Cuba
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