Thursday, October 16, 2014

Sin intereses laborales

Sin intereses laborales
[16-10-2014 13:51:00]
Aimée Cabrera
Corresponsal

(www.miscelaneasdecuba.net).- Los altos dirigentes del gobierno, que
tienen a su haber la esfera laboral se inclinan más hacia los sectores
que puedan aportar dividendos. Amplia cobertura han tenido en los
últimos tiempos los innovadores y racionalizadores, los mismos que
tienen que volverse magos para reparar una maquinaria, entre otros
equipos, que debe ser sustituida tras décadas de uso; pero sí divulgan
que el embargo no lo permite, aunque tampoco sus directivos y "cuadros"
acceden, al consentir el desvío de recursos y financiamientos.
La Central de Trabajadores de Cuba (CTC), en un acto de sumisión total,
quiere que sus afiliados, junto a sus familiares, apoyen a los delegados
del poder popular de sus comunidades así como que participen en activos
sindicales mensuales, matutinos, vespertinos y mítines entre otras
actividades en las que no se mencionan, por ejemplo, las huelgas.

La soga de la exigencia que nunca aprieta a los altos dirigentes,
persigue asfixiar a los líderes sindicales que, a su vez apenas tienen
apoyo de los afiliados que no ven solucionados sus más urgentes reclamos.

Mientras tanto se suscriben los Convenios Colectivos de Trabajo que
muchos trabajadores desconocen que existen en sus centros. Los que
pueden hablar sobre ellos destacan el tema de los sistemas de pago y la
disciplina laboral, que quedan solo recogidos por escrito ante la
indolencia de quienes los redactan.

"A mí no me importa el sindicato. Cotizo porque no me queda más
remedio, voy a la reunión por lo mismo. Llevo ya 18 años de trabajo,
estoy divorciada y mi hijo tiene que estudiar, vestirse y comer, tengo
que trabajar pero ahora quieren que haga guardia en el CDR y que
emulemos: ¡emulación socialista a esta hora! No digo yo si la gente que
puede, se va (emigra)", declara desde el anonimato una trabajadora del
sindicato de los servicios.

También la paternalista CTC felicitó a los adultos mayores en ocasión de
la efemérides internacional a finales de septiembre. La congratulación
harto irónica no iría encaminada a los jubilados que nunca más son
atendidos por los dirigentes del centro donde trabajaron por décadas.

"Mi mujer y yo estuvimos casi 40 años trabajando. Cuando nos fuimos a
jubilar no aparecían todos los años, perdimos varios. Eso nos bajó la
jubilación. No llegamos a 250 pesos, entre los dos son menos de 500
pesos para el mes, la CTC "exprime "a los trabajadores, todo es una
hipocresía, y me llamo José Fernández Martínez, y le digo que la CTC es
una mentira", reafirmó.

Otros han intentado mantener cierta relación pero cuando van de visita
al centro, hay quiénes los evitan para no tener que verse en el
compromiso de ayudarlos, expresa una jubilada por peritaje médico.
Recuerda que el antecedente a un accidente cerebral fue una discusión
por una arbitrariedad de su jefe administrativo. Con un fuerte dolor de
cabeza tuvo que permanecer en su labor hasta que acabara la jornada.
Tarde en la noche, tuvo que ser ingresada en un hospital grave. Se pudo
salvar, pero han quedado secuelas físicas y peor aún, sus ex colegas la
han marginado.

Los trabajadores en general evitan dar opiniones sobre su situación
laboral. Entrar en un centro de trabajo para hacer cualquier gestión es
chocante. Desde una tienda recaudadora hasta las oficinas tributarias o
comerciales todas son concebidas en locales cerrados y en casi ninguna
funcionan los equipos de aire acondicionado.

En las tiendas el olor de las carnes es nauseabundo. Estas y otros
alimentos están en neveras rotas o defectuosas, un riesgo más para
adquirir enfermedades estomacales, unas nuevas y otras que ya habían
sido erradicadas en el país.

Los trabajadores laboran sudados e incómodos. Todos están atentos a la
cuenta regresiva que les permita al fin, marcharse a sus casas. No
importa si los problemas continúan en la parada del ómnibus o si no
encuentran un alimento barato para preparar la cena, llegar a la casa es
encarar otros, que traen los hijos de sus escuelas, por tanto no hay
tiempo, ni deseos, ni miedos para seguirle el juego a la CTC y al CDR,
organizaciones leales a todo lo que esté en contra del bienestar ciudadano.

Source: Sin intereses laborales - Misceláneas de Cuba -
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/Article/Index/543fb1243a682e17b8a521ae#.VD_5VPnLfGE

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