Monday, November 21, 2011

Nos están matando poco a poco

Nos están matando poco a poco
Lunes, Noviembre 21, 2011 | Por Reinaldo Emilio Cosano Alén

LA HABANA, Cuba, 21 de noviembre (Reinaldo Cosano Alén, Sindical Press/
www.cubanet.org ) –Los vecinos próximos al vertedero ubicado en la
carretera de Tarará a Barreras, del municipio Habana del Este, se
sienten desesperados e impotentes por las contaminación, la peste y el
humo que deben respirar a cualquier hora por la combustión de la basura
que allí se bota.

"Nos están matando poco a poco con el humo", dice Ramona Muñiz, de 76
años, residente en la inmediaciones del enorme horno, antiguamente una
cantera de la que se extrajeron toneladas de tierra y rocas para la
construcción de la Vía Blanca en la década de 1950. Hace más de veinte
años el sitio fue convertido en vertedero municipal aunque inicialmente
sólo con el propósito de depositar podas de árboles, pero después todo
tipo de inmundicia.

El lugar se ha convertido en un infierno para decenas de residentes en
las proximidades. Allí se lanza e incinera todo tipo de inmundicias:
cadáveres de animales, envases plásticos, cartón, maderas, ramajes,
alimentos descompuestos. El vertedero está rebosado. La humeante cortina
de desperdicios ardiente, removida por el buldócer, que crea el peligro
de que el incendio se extienda, llega cerca de algunas viviendas, entre
estas la de Ramona, una asmática crónica, quien dice: "Esto es
insoportable, parece una burla o un castigo por nuestras denuncias ante
funcionarios y periodistas de la televisión que han visto con sus ojos
lo que ocurre, pero nadie le da solución".

Dulce María Miranda, otra vecina, refiere: "A veces tenemos que pasarnos
día y noche con tapabocas y puertas y ventanas cerradas, taponeadas con
papel para reducir la penetración del humo, aunque de todas maneras se
filtra. Hemos hecho múltiples denuncias ante funcionarios de Salud
Pública, el Poder Popular, el Partido Comunista y la prensa. Hacen
promesas de que el vertedero será clausurado. Así llevamos años, pero
no dan solución al grave problema de salud y medio ambiente. Cuando
sopla la brisa de tierra a mar, la contaminación llega, aunque con menos
fuerza, hasta el condominio exclusivo Tarará, a unos quinientos metros.
Vierten camiones con deshechos a cualquier hora y hasta traen la basura
de otros municipios. La peste y el humo son de mil demonios cuando el
buldócer raspa la costra quemada y la junta con la reciente. La humareda
nos asfixia, pero eso no parece importar a nadie".

Un ciudadano, de 26 años, que prefirió el anonimato dijo: "Cuando el
humo es muy fuerte no puedo dormir. Por la mañana voy a trabajar sin
haber descansado, fatigado, estropeado".

"No sé por qué tenemos que soportar este castigo. Hay una decena de
enfermos de diferentes edades, que atribuyen sus padecimientos a los
vapores nocivos. Algunos son asmáticos, ¡nadie se conmueve con este
cuadro de salud! Cuando es demasiada la candela avisamos a los bomberos
de Guanabo, echan agua, apagan la combustión momentáneamente pero horas
después se avivan las llamas. No van a la solución real, que es
clausurar el basurero, como han prometido las autoridades municipales y
provinciales y el Ministerio de Salud Pública", concluye la señora

http://www.cubanet.org/noticias/nos-estan-matando-poco-a-poco/

No comments:

Post a Comment